Por iniciativa de Julio Eggimann, la Cámara de Diputados de Santa Fe le realizó un homenaje al director técnico Hugo Rible, por su dilatada y destacada trayectoria en el fútbol de la Liga Venadense.

En una emotiva celebración en la que estuvieron presentes las distintas instituciones deportivas de Villa Cañás, dado que tuvo sus pasos por lo tres clubes de la ciudad: Sportsman, Studebaker e Independiente.

Nacido el 24 de noviembre de 1933, el “Negro” como lo conocen todos desde siempre, fue chofer y vendedor de pasajes de ómnibus y también empleado bancario construyendo su vida familiar y quehacer laboral, en localidades fundamentalmente del departamento General López. Pero en este caso se destaca su dilatada y notable tarea como director técnico de fútbol.

Tuvo sus comienzos en el club cañaseño de barrio Norte, Sportsman, atendiendo las divisiones inferiores durante mucho tiempo hasta hacerse cargo del plantel superior, saliendo campeón en 1986 en Primera División de la Liga Venadense.

También tuvo su pasaje breve pero exitoso por Studebaker, con la pasión de quien ha sabido amalgamar los aspectos técnico-deportivo y humano, de la mejor manera posible. También fue campeón con Independiente.

Hugo Rible ha sido siempre, para el fútbol local y regional, “una persona de una calidad humana excelente, con una bonhomía y una innata condición de buen trato hacia sus dirigidos, donde dejó entrever esa capacidad que no se aprende con los libros, la que da el tiempo: el saber escuchar, el saber entender, el saber ponerse en el lugar del otro. Y eso lo da la calle, el potrero y la vida”, resaltó Julio Eggimann durante el homenaje desarrollado esta semana en Villa Cañás.

La anécdota del Loco

Hugo Rible siempre se mantiene bien alto en la estima de uno de los personajes más destacados del fútbol argentino, como es Marcelo Bielsa. El Loco siempre recuerda que en sus inicios, cuando trabajaba en el fútbol formativo de Newell’s junto a Jorge Griffa, fue el Negro Rible quien le insistió para que viera y probara a Mauricio Pochettino, entonces un adolescente delantero de Unión y Cultura de Murphy, que al poco tiempo se destacaría como defensor en la Primera del club rosarino, como preludio de su exitosa carrera en Europa y la Selección, amén de su presente como entrenador top en Inglaterra.

Además Rible compartió viajes y charlas con Bielsa, quien una tarde de febrero del año 2002 pasó por la casa del Negro para entregarle una camiseta de la Selección Argentina firmada por todo el plantel, antes de viajar al Mundial, como una muestra de respeto y cariño.

Además de eso, Eggimann agregó: “Debo reconocer el aporte que hizo Hugo Rible en la elaboración de la Ley Provincial del Deporte Nº10.554, que en su oportunidad impulsé en la Cámara de Diputados, como idóneo en la materia, sirivéndome de su sabiduría en la temática deportiva y social”, completó.